Las grandes firmas afirman que en los últimos años hemos abusado de las moda, de la vuelta de los noventa, de la vuelta de los setenta, del punk, del mod…¿Significan los náuticos, por ejemplo, que eres un chico bien, estudiante de derecho y que el sábado vas con papá a la finca?
Pero tantas tendencias dificultan aunque a la vez nos ayudan a conocer a una persona, sin dejarnos llevar por el atrezzo. Así, según tus zapatos, a grandes rasgos, podemos decir esto de tí:
Clásicas Deportivas
Coleccionáis las firmas que en los 90 moríais por llevar a clase de gimnasia. Soléis combinarlas con la sudadera que os regalan para el cumpleaños los amigos. Te han cogido el móvil sin darte cuenta y se han preocupado de encontrarla en la caché de tu teléfono.
¿Zapato de piel?
Leéis blogs de moda, ¿no lo negaréis? Además, os aseguráis de que vuestro zapato esté limpio siempre. Vuestros favoritos son los tipo oxford de hebillas o mocasines y pasáis por Calzados Múñoz León los sábados por la mañana, generalmente solos. ¡ Es genial ¡
En sandalias
En su mayoría sois padres. Eso no falla. Imaginamos que tendréis muchas camisas y pantalones de lino En los últimos cuatro años, el mejor momento fue aquel concierto de U2 con los colegas de la universidad. Es hora de repetir
¡ Chanclas con calcetines !
Generalmente suele ser un peregrino que ya dejó la mochila en el albergue de la Plaza del Grano y sube la calle Ancha alucinando con su belleza. También puede ser un centroeuropeo de paso que baja la misma calle con la misma alucinación, o un aborigen que salió en bici a dar una vuelta. No sabemos bien el motivo, pero nos encanta
Con zuecos
Se nos ha metido en la cabeza que soléis tener relaciones complicadas y que tendéis a enamoraros y desenamoraros con frecuencia. También pueden ser holandeses alucinando por la calle Ancha.
En zapatillas de casa
Si, si. ¿No los habéis visto? Cada vez son menos pero están censados. Son aquellos hombres indecisos que no acaban de decidir el modelo de zapato que les gustaría llevar y siguen en zapatillas. Cómodos pero en zapatillas. Las hay monísimas pero decídete ya. Un buen zapato puede cambiarte la vida.